Eres tan fascinante, imprevisible e insondable como la mejor de las artes, la mejor de las pinturas. Y por eso…
Voy a darte un beso de Klimt y un abrazo de Schiele bajo una noche estrellada de Van Gogh. Nos recorrerá calor de fragua como a un Vulcano de Velázquez y eso hará que te devore con la locura de un Saturno de Goya hasta que el placer te provoque un grito de Munch. La madrugada nos pillará como halcones nocturnos de Hopper por mirar relojes blandos de Dalí, para luego sorprendernos con un levantamiento de sol de Monet sobre un mar en el que buscamos una ola enorme de Hokusai bajo la que arrodillarnos para siempre.
XH O XB