Séptimo arte imprescin(e)dible, pero del tipo que puede pasar desapercibido. El mapamundi rastreado en busca de esas películas aparecidas en el último lustro que se merecen algo más, filmografías orientales, europeas, norteamericanas y latinoamericanas peinadas hasta encontrar esa clase de obras que no disfrutan de la publicidad necesaria, que no se estrenan en pantalla grande o ni siquiera disponen de una edición en dvd en el mercado nacional.
En esta primera serie de entradas rescato títulos de género negro, thriller, neo noir, policiaco, de mafia o de atracos, etiquetémoslas como se nos antoje; el abanico es variado y son pelis que pueden gustar a cualquier tipo de espectador, no ha de ser necesariamente un apasionado del crimen. Las reseño en tandas de 5, dosificando las películas a recomendar para incluirlas en otras tres publicaciones de aparición inminente.
Vamos con una buena muestra de perlas bajo luz negra.
Ya saben, separen párpados aquí.
Suburra
Italia – 2015
El título de la película puede resultar chocante en un principio, pero cuando averiguamos que Suburra era “el barrio romano donde nobles y poderosos de la antigua Roma se reunían con los criminales para comprar sus servicios en secreto”, todo cobra sentido. El nombre no puede ser más acertado. La obra la firma Stefano Sollima, un director on fire que acredita Romanzo Criminale, la reciente serie Gomorra y Soldado, la secuela de Sicario, de próxima aparición. Hijo del realizador Sergio Sollima (muy conocido en los sesenta por sus spaghetti western), Stefano es romano de nacimiento, y a pesar de ello, o precisamente por ese motivo, no va a hacer concesiones en su radiografía fílmica de una capital agonizante. Desenmascara Roma con igual maestría que la exhibida por Paolo Sorrentino en La gran belleza pero lo hace desde una perspectiva totalmente distinta. Nos muestra todo aquello que se esconde en el ángulo muerto, para después romper ese y cualquier otro juego de espejos y hacer caminar descalzos a sus personajes por encima de la alfombra de cristales rotos. Estos personajes, interconectados todos por la ambición de poder y dinero, van desde un político corrupto hasta un aterrador patriarca de familia gitana, pasando por un relaciones públicas de la noche romana, una prostituta de lujo y miembros diversos de la mafia. El hilo argumental que teje la telaraña es la especulación del suelo y la aprobación de un proyecto de ley que permitirá al crimen organizado controlar en la sombra la construcción de un área lucrativa al estilo Las Vegas. El tema, de desgraciada actualidad, se expone y se aborda sin paños calientes, contextualizado históricamente en un periodo convulso en Italia, allá por 2004, con el gobierno de Berlusconi al borde del precipicio y un Papa a punto de renunciar al cargo. Las similitudes entre ficción y realidad van mucho más allá de la casualidad. El vínculo estrecho entre dirigentes electos y mafias poderosas queda expuesto de forma magistral, de un modo similar a cómo se representa en New World, otra cinta extraordinaria que combina a la perfección el traje y corbata con el cuchillo de hoja herrumbrosa (película también reseñada en el post). La banda sonora corre a cargo del grupo M83, que consigue aumentar más si cabe la pegada de ciertas escenas. En definitiva, Suburra es una película de factura mayúscula, fascinante en la acción y compleja en la ramificación del mensaje social mediante el entramado de sucesos. No es ninguna locura afirmar que se trata de la mejor película sobre mafia italiana en más de una década.
Northwest
(Nordvest)
Dinamarca – 2013
Tal vez sea la película más humilde y desconocida de este compendio, y a su vez, sin duda, es una de las que recomiendo con mayor fervor. Nordvest nos asoma a los bajos fondos daneses a través del personaje de Caspar, un delincuente de poca monta que realiza robos en viviendas de la clase alta y que pronto llama la atención de un chulo de la zona, un delincuente de mayor categoría que acaba acogiendo al muchacho bajo su ala. Caspar, de apenas 18 años, pasa a encargarse del transporte y cuidado de las prostitutas en sus citas a domicilio, así como de la venta de droga. Terminará por inmiscuir a su hermano pequeño en sus asuntos y juntos se verán aspirados sin remedio por los vórtices de un sumidero oscuro e inmisericorde. La película nos retrae al primer Nicolas Winding Refn, aquel de Pusher y la Dinamarca de calles sucias y entornos opresivos, pero en el caso de Nordvest, con un resultado final mucho más logrado y atractivo, mucho más reivindicable.
New world
Corea del sur – 2013
Una elegante película de gangsters con un guion imbricado donde se suceden las traiciones en medio de una lucha provocada por un vacío de poder, por un trono que ocupar. Agentes infiltrados, políticos corruptos, especulación del suelo, un personaje principal muy bien perfilado psicológicamente, violencia en las dosis justas y necesarias para la trama, policía manipuladora y despiadada, Choi Min – Sik y un tema central de B.S.O. fantástico. Lo tiene todo. De las mejores películas versadas en organizaciones criminales modernas que se han hecho en los últimos años.
Que dios nos perdone
España – 2016
Esta película nos sonará a casi todos, en mayor o menor medida. Se ha hecho merecedora incluso de algún Goya. Aun con esas la incluyo en esta lista porque sería una pena que al buen aficionado al cine se le pasara por alto, o no le diera el crédito suficiente como para otorgarle una oportunidad, tal vez por el simple hecho de ser un thriller de asesino en serie a la americana hecho en España. El guion funciona como un reloj y tiene el arraigo necesario en nuestra realidad, en nuestro modo de ser y de vivir, como para que no resulte inverosímil en ningún momento, en ningún aspecto, a pesar de que la temática muchas veces ponga trampas golosas al alcance de los realizadores. Rodrigo Sorogoyen las esquiva con clase. Aquí no hay giros inesperados o pirotecnias visuales. La película alcanza el sobresaliente en gran parte debido al trabajo de su pareja protagonista, dos compañeros de homicidios. Roberto Álamo está imponente tras el sudor y los nudillos de un policía agresivo y se hace acreedor del premio a mejor actor protagonista que acaba recibiendo con justicia en la ceremonia del cine patrio. El contrapunto perfecto se lo pone Antonio de La Torre en el rol de investigador metódico, reservado y tartamudo. En el caso del intérprete malacitano, su buen hacer ya no es sorpresa, en absoluto. Que dios nos perdone es un neo noir de calidad, muy disfrutable. Herencia cinematográfica de David Fincher por la que damos gracias dobles.
Out of the furnace
USA – 2013
Dentro de las obras recomendadas y agrupadas bajo el epígrafe Perlas bajo luz negra, he dejado para el final la que posiblemente sea la mejor. Sin duda, su casting es soberbio. El elenco incluye a Christian Bale, Casey Affleck, Woody Harrelson, Zoe Saldana, Willem Dafoe, Forrest Whitaker y Sam Shepard. Sí, coge aliento. Y no hay que olvidar que se trata de una producción menor, prácticamente cine independiente, lo que habla a las claras del potencial que debieron ver en el proyecto desde el principio estos actores consagrados. Un potencial que conserva la película, una historia de sentimientos atrincherados. Dureza bajo la piel, dureza sobre la piel. De nuevo, la violencia sin escapatoria de unos Estados Unidos fantasmales. Sacrificar el futuro personal por un mísero presente familiar, puede que por solo unos instantes. Para no resumir la trama de forma convencional, aquí va una tormenta alusiva: Falta de oportunidades. Deudas. Hermanos. Un currante. Un ex militar roto y desquiciado. Un accidente. Una condena. Una segunda oportunidad que se resbala. White trash. Peleas ilegales. Oscuridad, soledad y metanfetaminas. Un ciervo. Un rifle con mira telescópica. Simbolismo. Un amor que recuperar.
Además, dos de los mejores instantes interpretativos en toda la carrera de Christian Bale, realmente sobrecogedores; Casey Affleck en estado de gracia, espeluznante; Woody Harrelson de auténtico cabrón, un psicópata que consigue acojonarnos con cada irrupción en pantalla. Una película que guarda en sus fotogramas mucho más de lo que parece a simple vista, que ya es mucho. Sobriedad, crudeza, desesperación y violencia orquestada por Scott Cooper, director que ya ha asumido proyectos de mayor envergadura.
Para acabar, qué mejor que un par de pequeñas muestras que acrediten mis últimas palabras. Sin spoilers significativos, aquí adjunto tres secuencias cortas en las que se puede percibir la profundidad, la electricidad y el nivel interpretativo que encierra este verdadero peliculón:
XH O XB
P.D: En un par de días, otras cinco películas en un nuevo post de Cine a descubrir.